Con diez millones de votos,
de arrepentidos e ingénuos
ganaron las elecciones
y entraron en el Gobierno
unos pillos socialistas
que se llamaron obreros,
sin tener un sólo callo
en la llema de los dedos.
Con la rosa por testigo
los ministros prometieron
dar trabajo, hacer justicia,
predicar con el ejemplo.
Pasaron algunos meses
y, al llegar al año y medio
las rosas ya estaban secas
y sus promesas volaron
cual hojas que lleva el viento
Tragaldabas, tragaperras,
tragacargos, tragasueldos
y, en menos que canta un gallo,
nos dejaron medio en cueros.
La corte de los milagros
salió del tunel del tiempo
y volvieron los mendigos
los parados, los hambientos,
por miles las prostitutas,
con sus chulos al acecho,
invertidos, descuideros
y zorras de pelaje nuevo.
En calzón van pensionistas,
en pernil van los obreros,
empresarios en pelotas,
contribuyentes en cueros,
los ladrones en la calle,
los tontos al Ministerio,
los ministros en Mercedes,
los electores al huerto,
indultos a terroristas
y guardias al cementerio.
2 comentarios:
-Hablando de piratas no puede pasar otra cosa, han jodido España y ahora tus versos, menos mal que en este otro lado también tenemos pirata, no sufras, que con un pequeño esfuerzo se entiende el per-verso. ¡Bueno, por cierto!
Arreglado! Felicidades este es de los mejores que te he leido... Sigue así que la pagina va como la espuma
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