domingo, 14 de febrero de 2010

EL MANIQUÍ DE MARICHALAR


NO HAY MÁS CERA QUE LA QUE ARDE
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De piedra "me quedaó", ¿no te lo crees?.
¿Es que no has visto nunca un tentadero?.
Pues yo he visto un maniquí del Corte Inglés
montado en carretilla, por los piés,
y que estaba asomado a un burladero.
¿A quién me recuerda esa figura?,
preguntéme, no saliéndo de mi asombro,
- no puede ser, sería una locura -
respondíme, temiendo una conjura,
¿Marichalar arrojado a los escombros?.
Primero fué lo del "cese temporal",
(para entonces no dormía con Elena);
luego... ¡ fuera de las fotos!, (daba mal)
y llegó el esperpento.... ¡Valle Inclan!.
Yo que él, me cortaba ya las venas.
MORALEJA:
Es muy triste que te copien hecho en cera
y que no te reconozca ni tu padre.
Que te exhiban después de esa manera
y que, además, ya no seas lo que eras.
¡ Te han montado un final de puta madre !.

4 comentarios:

luis dijo...

Seguiré subiendo mis chascarrillos con el ordenador de Loli, hasta que recupere el mío.

Pepe dijo...

-¡No hay mal que por bien no venga!,
me refiero a que "informáticamente mancao" estaremos deleitándonos de tus chascarrillos, es como volver a los princípios, cuando no disponias de editor.(Espero que solo sean unos días)
-Este de hoy es un claro ejemplo de actualidad, que como bien desembrollas a pasado de "Jalea Real" a "Cerón de vela", (Cosas de la colmena).
-Plas,plas,plas,plas,plas,plas,plas.

manolo dijo...

Efectivamente, los del Marichalar tiene su guasa. Y tú lo has plasmado con el humor ácido que caracteriza a tus coplillas.
¡¡¡Fantástico, Luisito!!!
PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS

Gyoni dijo...

Lo que han hecho con Marichalar no tiene nombre.

En la vida real no se puede emplear la técnica de cortar y pegar, por ende tampoco en la Historia y mucho menos cuando se trata de personas (seres humanos, concepto que habría que depurar en los tiempos que corren).
La Historia es lo que es (un acontecimiento pretérito). Se puede interpretar, tergiversar, manipular, falsear, suplantar, adulterar. La verdad absoluta en este campo no existe (un hecho determinado puede interpretarse de mil maneras, influidos o contaminados por una ideología o por nuevos conocimientos) aunque posiblemente podamos acercarnos a ella. Pero hay una cosa que jamás se podrá lograr con la Historia que es borrarla. Los sucesos y acontecimientos están ahí y hay permanecerán -pese a quien le pese-, per secula seculorum
¡Menuda historia!

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