Un chino va a una casa de citas solicitando una chica, resulta que no quedan chicas disponibles, así que la madame decide engañar al Chino, para ello ha instalado una máquina expendedora de muñecas hinchables. El Chino decidido se dirige al expendedor y selecciona una chica y la lleva a una habitación. Al cabo de un rato, sale el Chino corriendo y asustadísimo gritando:
-Yo no he hecho nada, de verdad, tan solo la mordí en una tetita y.....¡Se tiró un pedo enorme y salió volando por la ventana
2 comentarios:
JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA ¡Buenisssssiiiissssiiimmmmmoooo, Pepito!!
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El chiste es cachondo pero más cachondo es el expendedor de chavalas. Muy bueno, Pepito, me tienes intrigado con estas propuestas que te sacas, ¿de la manga?, espero que no, ¿de donde, majete?.
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