EL TROVADOR IMPERTINENTE
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Yo, en la playa, me dedico
a observar al personal.
Separo a humildes y ricos:
Los primeros, (mil y pico)
están "tiesos", sin un real;
se ve que lo pasan mal
y el presupuesto es tan chico
que no llegan y, al final,
sólo pueden almorzar
con un sandwich de PanRico.
De los segundos, me explico:
diez o doce son de hocico *
uno solamente veo,
(por su yate de recreo)
que tiene un gran capital.
Después están los "negritos",
siempre los tienes detrás,
con gafas, con relojitos
y, sabiendo que es delito,
sí comen de los demás.
Y el dueño del chiringuito
que, como al principio, cito
en agosto, ganan más.
Y es que abusan cuando vas
y, por comer "pescaito",
o una paella, o bonito,
incluso un agua sin gas,
pagas lo que no está escrito.
MORALEJA:
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Ni todos los que son están,
ni todos los que van lo son.
Dicho así, como un refrán,
igual que ostias, he hecho el pan,
pero queda... ¡del copón!. * de boquilla
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2 comentarios:
-Muy obsevador Luisito y muy difícil de saber cual es rico y cual es pobre, que en bañador y sin carnet todos parecemos iguales, por eso el del chiringuito cobra tanto, no vaya a ser que por cobrar poco ofenda al rico y si ha cobrado de mas a un pobre....que se joda que aplica la misma doctrina que ZP, sangrar al pobre por los ricos que se escapan.
-Yo también soy muy observador y veo que no descansas eres inquieto de día de noche y en la siesta lo trabajas y lo plasmas en el blog.
-Por cierto, yo en la playa solo observo a las tias en toples, te invito a que hagas una crónica del tema.
-Esta crónica también me ha gustado mucho.
-Plas,plas,plas,plas,plas,plas,plas,plas,plas,plas,plas,
¡¡¡GENIAL!!!!!
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